Esta claro que errar es de humanos. Y muchos de nosotros nos hemos equivocado, nos equivocamos y nos equivocaremos alguna o muchas veces. Pero no por ello uno se tiene que escaquearse de lo hecho.
Resulta que hoy me han llamado para informarme que ha habido un «problemilla» con dos paquetes que estaba esperando: uno contenía la edición en caja del Ashigaru de A CHALLENGE OF HONOUR (limitado a 38 copias y agotado desde hace mucho) y la versión original y del Elisabeth Bukez de COLD FUSION (también en edición limitada y por supuesto agotado hace mucho) con un coste total de 120 € más gastos de envío desde Italia; y el otro contenía varios (8 o 9 CDs, algunos en edición limitada y algún otro en edición «defectuosa» [una edición de 99 copias que contiene una copia número 100]) editados por CORVUS de Bulgaria con coste total de 90 € más gastos de envío. Total: 210 € más gastos de envío.
Pues resulta que debido a un fallo, han entregado mis paquetes a otro apartado de correos: en vez de entregarlos al 1XY los han entregado al YX. Como veis, dos números que se parecen mucho (los oculto para mantener el anonimato del ocasionante de todo esto). Resulta que la persona encargada de hacer la entrega, se dio cuenta de lo ocurrido y ha intentado ponerse en contacto con la persona a la que le han sido entregados mis paquetes, pero este último dice no saber nada del asunto (como nos gusta quedarnos con las cosas ajenas).
¿Para eso pago yo cada año mi apartado de correos? ¿Para eso pago 50 €? ¿Para que los paquetes, certificados por cierto, se los entreguen a otro?.
Aún no he tenido el gusto de hablar con la persona responsable de todo este lío, parece que sólo trabaja de mañana, pero que se vaya preparando… De momento, se ha ganado una colleja electrónica y una reclamación al canto. Y me estoy planteando en denunciar a la persona que se ha quedado con mis paquetes de haber cometido un robo, aunque no se si esto será posible.
2 comentarios